El fútbol, un deporte que debería ser símbolo de unidad y pasión, se vio empañado este sábado por un incidente repudiable y vergonzoso. El enfrentamiento entre Provincial Ranco y Santiago City, llevado a cabo en el Estadio Carlos Vogel Meyer de La Unión, terminó en escándalo, dejando una marca oscura en la Tercera A del fútbol chileno.
Un Final Plagado de Agresiones
Tras un disputado encuentro, la victoria se la llevó el cuadro metropolitano de Santiago City. Sin embargo, el final del partido fue todo menos una celebración deportiva. Los fanáticos locales, descontentos con el resultado y la actuación arbitral, desencadenaron una serie de acciones violentas que terminaron por convertir el campo de fútbol en una zona de caos y descontrol.
Un grupo de hinchas tomó la lamentable decisión de invadir el terreno de juego, dirigiendo su furia hacia el cuerpo arbitral. La situación escaló rápidamente, culminando en una cobarde agresión hacia uno de los árbitros, quien recibió un golpe en el rostro con un objeto contundente, resultando en una herida grave.
🔴 La agresión que sufrió el juez del encuentro entre #ProvincialRanco y #Sancity de parte de un aficionado de la escuadra local por lo visto. Veremos que dice la ANFA al respecto ⚽️. #TerceraDivisiónA #ascenso #anfa pic.twitter.com/C4qk0IZi3r
— •Diego Díaz 🦁✍️⚽️• (@DiegoDeporOhi) October 21, 2023Barricadas e Intervención Policial
La violencia no se limitó al terreno de juego. Fuera del estadio, las cosas se tornaron aún más tensas y peligrosas. Ni los árbitros ni el equipo visitante pudieron abandonar las instalaciones durante horas debido al violento descontrol de la hinchada local. La situación requirió la intervención del GOPE de Carabineros, quienes tuvieron que acudir al lugar para intentar restaurar el orden.
Barricadas fueron erigidas por los fanáticos alrededor del estadio, obstaculizando los pasajes y contribuyendo a un ambiente cargado de hostilidad y agresión.
