La derrota del Barça contra el PSG y la consecuente eliminación en la Champions League tiene variadas implicaciones, más allá de las estrictamente deportivas, y una de ellas es el debilitamiento del vestuario.
Gündogan, decepcionado con la derrota y la roja de Araujo: «Se lo hemos regalado»
Gündogan se mostró muy crítico, tras el compromiso contra los de Luis Enrique, con el juego del equipo y en especial con Ronald Araujo, que vio la roja directa en el minuto 29 por una entrada a Barcola y dejó, por lo tanto, al bloque catalán con 10. «Estoy decepcionado, muy decepcionado. Estaba en nuestra mano y se lo hemos regalado al PSG. Se lo hemos regalado de la forma más fácil. Es duro decirlo… Pero en estos momentos tan cruciales tienes que estar seguro si vas a por el balón. Yo no sé si toca la pelota o no… Yo prefiero conceder un gol o incluso permitir un uno contra uno. Yo no sé si llegaba al balón o no, pero dale al portero la oportunidad de pararla, o incluso dales el gol», aseveró Gündogan este martes por la noche tras la vuelta de los cuartos de final en CBS Sports.
Respuesta de Koundé y otros compañeros
Las palabras del germano, que acostumbra a ser muy autocrítico también con él mismo y que no duda en compartir sus conclusiones tras los partidos, no han sentado bien a algunos de sus compañeros de equipo. Koundé ha escrito hoy un mensaje que parece un dardo dirigido al alemán, recordándole que al fútbol juegan once. «Una decepción inmensa no clasificarse para las semis cuando teníamos todo para hacerlo. Por cierto ganamos como equipo y perdemos también como equipo, siempre. Toca recuperar y prepararse para El Clásico de este domingo. Gracias por el apoyo culers», anotó en sus redes sociales. Su comentario ha tenido el aplauso de otros compañeros, como Marcos Alonso, Sergi Roberto o Vitor Roque.
Xavi tiene, por lo tanto, un duro trabajo por delante las próximas horas y semanas: recomponer social, anímica y deportivamente al Barcelona.
El técnico, además, también ha visto cómo sus jugadores le contradicen: él achacó la derrota contra el PSG al árbitro, y sus jugadores no consideran a Kovacs determinante.